( a los niños de la guerra)
Hay una pena
desafiando al silencio,
atosigando al llanto,
y llueve desde el cielo
párvulo de tus miradas,
canción atroz de bombas y misíles,
tañir de campanas desentonando.
atosigando al llanto,
y llueve desde el cielo
párvulo de tus miradas,
canción atroz de bombas y misíles,
tañir de campanas desentonando.
Y llueve
y
llue
ve
desmesuradamente,
en tu mar de esperanzas
en tu mar de esperanzas
la nota del espanto.
Sandra Ignaccolo